Según un análisis del llamado Estudio Global de la Carga de la Enfermedad (GBD), en el periodo 1990-2013, publicado este lunes en la revista británica ‘The Lancet’, más del 95% de la población del mundo tiene algún problema de salud y en muchos casos hay personas con hasta cinco enfermedades.
La investigación indica, además, que la proporción de años de vida saludable perdidos por diversas dolencias aumentó al pasar del 21% en 1990 al 31 % en 2013.
A medida que la población mundial aumenta y se incrementa el número de ancianos, las personas que viven en condiciones no totalmente saludables puede verse incrementada en los próximos años, agrega el estudio, presidido por Theo Vos, del Instituto de Sanidad y Evaluación de la Universidad de Washington (EE. UU.).
Los investigadores llegaron a esta conclusión tras analizar en detalle distintos aspectos del estado de la salud de la población en todo el mundo entre los años 1990 y 2013.
En los últimos 23 años, agregan, las principales causas del deterioro de la salud han cambiado considerablemente.
En 2013, la artritis, los dolores de espalda, la depresión, la ansiedad, el consumo de alcohol y las drogas contabilizaron casi la mitad de los problemas de salud de la población.
Además, los autores señalan que, por ejemplo, el fuerte incremento de los casos de diabetes -que han aumentado un 43% en los últimos 23 años- contrastó con el incremento de muertes por esta enfermedad, que fue de tan solo el 9%.
“El que la mortalidad esté descendiendo más rápido que las enfermedades no mortales y que prevalezcan las lesiones es otra prueba de la importancia de prestar atención al aumento de la pérdida de salud (…) y no centrarse simplemente en reducir la mortalidad”, señaló Vos.
El GBD analizó 35.620 fuentes de información sobre las enfermedades y lesiones registradas en 188 países en el periodo indicado y su impacto en el sistema sanitario de las naciones.
Según el estudio, hubo un aumento en la pérdida de salud asociada con la diabetes (un alza del 136 %), el alzheimer (un 92 %), abuso de medicación (120 %) y artrosis (75 %).
En países como México, Nicaragua, Panamá y Venezuela, la artritis fue el tercer factor que contribuyó a la discapacidad.
Vos ha resaltado que los problemas mentales que afectan a la población no han recibido la atención necesaria.
“Atender estos asuntos requerirá un cambio en las prioridades sanitarias en todo el mundo, no ya para que la gente viva hasta ser mayor, sino que también estén sanas”, agregó Vos.