La crisis en el sistema de salud, motivada entre otras cosas, porque a los hospitales y clínicas se les adeuda más de 5,3 billones de pesos, llevó al ministro de Salud, Alejandro Gaviria, a tomar medidas que le den liquidez al sistema.
Gaviria dijo que entre las acciones “la más importante tiene que ver con la reglamentación de la subcuenta de garantías del Fondo de Solidaridad y Garantía (Fosyga). Es decir, créditos con tasa compensada y plazos largos para EPS e IPS”.
El Ministro aseguró que también van a incrementar la compra de cartera a las IPS, de manera que se puedan alargar esos créditos. “Aprovechando un artículo del Plan de Desarrollo, las cajas de compensación que operan sistemas de salud podrán desatrasarse de sus obligaciones, pagando algunas deudas pendientes”, agregó.
En casos particulares, como los hospitales de Antioquia, el Ministerio está gestionando un crédito para que Savia Salud pueda pagar las deudas “originadas en buena medida en el crecimiento de los servicios y medicamentos no POS del régimen subsidiado”.
Con el Hospital Universitario del Valle, el gobierno está trabajando con la Secretaría de Salud departamental para lograr la liberación de recursos del Sistema General de Participaciones.
“La clave para la solución, como en toda crisis financiera, tiene que tener un buen diagnóstico, claridad en las reglas de juego, liquidez y tiempo”, aseguró Gaviria.
El presidente de la Asociación Colombiana de Hospitales y Clínicas, Juan Carlos Giraldo, pide al Gobierno que en su plan de choque sea claro en decir cuándo y cuántos recursos se van a desembolsar, así como quiénes serán los beneficiarios.
En lo que tiene que ver con las cajas de compensación familiar, Giraldo explica que se deberían liberar entre 600 y 700.000 millones de pesos, no ateniéndose a la libre voluntad de las mismas sino a un cronograma para que máximo en el segundo semestre de este año hagan el pago de sus obligaciones.
El vocero de los hospitales pide que la subcuenta adicional del Fosyga, que busca ayudar a las EPS a tener créditos con la banca, garantice que tiene fondos.
Por su parte, el presidente de la Asociación Colombiana de Empresas de Medicina Integral (Acemi), Jaime Arias, asegura que aunque el Ministro ha hecho lo posible por resolver la crisis “las compras de cartera y créditos son medidas buenas que tapan huecos, pero mientras el gasto de salud no suba por lo menos un punto del Producto Interno Bruto (PIB) lo demás son medidas paliativas, y él lo sabe”.
Arias asegura que su gremio no tiene caja para responder a las deudas: “Casi todas las EPS, incluyendo las grandes, están en el límite de la siniestralidad, es decir, gastan 95 pesos de cada 100 pesos en servicios de salud. La plata que llega mensualmente se va”, dice y aclara que esta situación se ha juntado con otros hechos, por ejemplo, el anuncio del recorte de presupuesto que puede ser de más de un billón de pesos.
Otra preocupación que tiene el sector, según Arias, es que el próximo año entra en vigencia la Ley Estatutaria de Salud, que va a significar un crecimiento muy grande de los servicios, justo cuando el Ministro ha dicho que en el último año un millón más de personas ingresaron al sistema, es decir, que ya son 46 millones quienes demandan servicios.